Imposible evitar,
la voz.
No se va, nunca.
A veces sustancias extrañas
logran que baje el volúmen
y sigue de largo.
Más ahora, su vestigio
pereció bajo la lava del Vesubio,
Es un día como todos.
Magma incandescente,
acá no hay nadie,
Solo una llaga viva,
La soledad del páramo,
km que no puedo caminar,
la llaga se está infectando.
aquí no hay eter,
aquí no hay gente,
pereceré nadie llegará.
En medio del ardor de la llaga,
la pus va invadiendo
mientras la llaga ya está en el encéfalo.
El último dejo de conciencia
pergunta porqué el volcán erupcionó
si no había señales bajo los suelos.
La quemazón va cediendo
a un estado de duerme vela,
estoy deviniendo en cosa.
Queridas hijas: Su mamá las ama.
No duele ya, estoy entrando en el eterno infinit+}{.-,,m
Anna Donner Rybak © 2011